Las calderas utilizan diversos combustibles, entre los más utilizados están el carbón, el gas y el gasoil. Sin embargo, en la actualidad y en función de evitar la contaminación ambiental y de utilizar calderas amigables, utilizar pellets o combustible sólidos se han constituido en una excelente opción.
Tipos de combustible para calderas
Si bien cada tipo de caldera utiliza un combustible diferente, el coste de los mismos, su rendimiento y ventajas, pueden ser determinantes a la hora de adquirir una nueva caldera.
Carbón
Las calderas que utilizan carbón como combustible son seguras y no implican demasiados costes en su mantenimiento, ya que con una limpieza anual del sistema y el vaciado dos veces al años el cenicero es suficiente. Sin embargo, requieren de un depósito para almacenar el carbón y son de gran tamaño.
Gas
Este es uno de los combustible más económico del mercado si se compara con el coste del gasoil o de la electricidad. El incremento estimado anual del producto es de aproximadamente el 15% y ofrece un excelente rendimiento y un bajo consumo energético. No implica costes de transporte ya que se recibe mediante sistemas de tuberías. Además, proporciona calefacción las 24 horas del día y en algunos modelos de calderas, es posible contratar el sistema a distancia.
En el mercado existen diversas calderas que pueden utilizar gas natural, propano o butano alternativamente y que ofrecen un rendimiento superior al 92%. Además, se puede elegir entre calderas de suelo o tipo mural de acuerdo a tus necesidades. Hoy en día, las aprobadas por el RITE son las Calderas de Condensación de bajo NOx, que son mucho más seguras y no presentan riesgos para los usuarios.
Gasoil
El gasoil, también es un combustible utilizado en las calderas, particularmente en grandes casas, locales comerciales o fábricas. La mayor ventaja del gasoil es la rapidez con el que calienta las estancias. También resulta adecuado utilizar gasoil cuando no se dispone de gas natural en la zona. Son más contaminantes que las calderas de gas o de biomasa.
Existen tres tipos de calderas de gasoil, las de condensación que ofrecen una elevada eficiencia y un alto rendimiento; las convencionales disponibles de diferentes potencias y tamaños; y las de acero, que minimizan la contaminación sónica, son de alto rendimiento y buena eficiencia energética
Biomasa
Las calderas que utilizan biomasa son amigables con el medio ambiente debido a que producen CO2 que permiten un balance neutro de sus emisiones, además es un combustible que puede ser muy económicas, incluso en las zonas rurales puede obtenerse de manera gratuita. Con frecuencia se utilizan pellet, astillas y hueso de aceituna. Este tipo de combustible es más adecuado para zonas con escasa población o rurales debido a la emisión de humo
Quizá el combustible más utilizado debido a sus múltiples beneficios sea el gas, sin embargo, la biomasa está escalando posición y a futuro es posible que llegue a ser uno de los más utilizados en favor del medio ambiente y gracias a su bajo costo, particularmente los pellet ya que generan menos cantidad de ceniza y el mantenimiento de las calderas se minimiza.